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Ver artículosEn el Día Mundial de Asistencia Humanitaria, Cáritas de Monterrey reconoce con admiración la humilde labor de quienes dedican su jornada y sus vidas llevando ayuda humanitaria a aquellos que sufren y son afectados por las distintas crisis en el mundo.
Son numerosos las mujeres y hombres que arriesgan sus propias vidas para salvar a otros y hoy más que nunca, hemo visto la labor desprendida de los trabajadores de ayuda humanitaria.
La ayuda humanitaria salva vidas. Alivia sufrimientos de poblaciones afectadas por crisis. Su origen viene de la transferencia de recursos de un donante a un receptor que se dedica a ayudar al otro.
Entre las características principales de la ayuda humanitaria se encuentra que: son a corto plazo y no tiene fines políticos, comerciales ni militares, no sustituye gobiernos ni resuelve los problemas estructurales del país afectado.
Principios para la ayuda humanitaria
De hecho, la ayuda humanitaria se basa en cuatro principios que estableció El Comité Permanente entre Organismos (IASC) de Naciones Unidas:
- Humanidad: el sufrimiento humano debe aliviarse donde quiera que ocurra. El objetivo es proteger la vida y la salud al tiempo que se garantiza el respeto por los seres humanos.
- Imparcialidad: la acción humanitaria debe llevarse a cabo basándose únicamente en las necesidades, no haciendo distinciones basadas en la nacionalidad, raza, género, creencias religiosas, clase u opiniones políticas.
- Neutralidad: los actores humanitarios no deben tomar partido en las hostilidades o participar en controversias de carácter político, racial, religioso o ideológico.
- Independencia operativa: la acción humanitaria debe ser independiente de los objetivos políticos, económicos, militares u otros que cualquier actor pueda sostener que comprometa su capacidad de actuar de acuerdo con los principios fundamentales.
¿Cómo podemos solidarizarnos con los más necesitados?
- La sociedad civil debe organizarse para crear conciencia y también participar en donaciones para los distintos fondos de ayuda humanitaria.
- Impulsar alianzas entre el sector público, privado y organismos intergubernamentales.
- Aprovechar el potencial de las redes sociales y las nuevas tecnologías. Por ejemplo, luego del terremoto de Haití, se desarrollaron herramientas para la guía y búsqueda de equipos de rescate, localización de personas desaparecidas y distribución de alimentos y medicamentos a las poblaciones más afectadas.
- Los medios de comunicación tienen un rol relevante en cuanto a la prevención y gestión de ayuda. Por ejemplo, Thompson Reuters, luego de la crisis de Ruanda, creó el programa AlertNet, que consiste en un servicio de noticias gratuito, cuyo objetivo es cubrir las grandes crisis con información verídica.
En Cáritas de Monterrey nos enorgullecemos de todos nuestros voluntarios, quienes diariamente realizan actividades humanitarias con el único propósito de ayudar a sus semejantes, un gran ejemplo de fraternidad.
