La prisa nos hace ciegos. En sociedades como la nuestra, vamos con los ojos vendados y no vemos a nuestro alrededor. En el transporte público, la mayoría vamos mirando nuestros celulares, cuando caminamos, lo hacemos como en automático, con la mente en nuestros pensamientos y problemas, ni siquiera mirar a los que nos encontramos de frente. En este triste contexto, ¿qué posibilidad hay de realizar buenas acciones?
Las buenas acciones no son exclusivas de los católicos, pero deberían ser nuestro distintivo. El mundo necesita a mucha gente realizando buenas obras. Es necesario bajar nuestro ritmo y observar. Al lado tuyo hay un anciano cansado. Cédele el asiento, aunque no esté reservado para él. Si caminas conscientemente, verás cuánta gente necesita un gesto amable, una cortesía para aligerar su carga. Incluso una sonrisa puede ayudar.
En tu lugar de trabajo solo necesitas un poco de atención para realizar una buena acción. Un elogio para alguien que luce triste puede cambiar toda la jornada. Poner el café para todos o ayudar a alguien con objetos pesados son buenas obras que hablan de tu generosidad y buena conciencia.
Hay muchas buenas acciones que no afectan tu bolsillo
Solo necesitas observar y actuar oportuna y discretamente.
En casa hay personas que hacen algo para ti, la comida, lavar tu ropa, asear la casa. ¿Qué buenas obras has tenido para ellos? Puedes dejar un rato tu ocio y prepararles un café, comprarles algo para la cena y escucharlos hablar de su día. Es increíble lo bien que nos cae la presencia de alguien querido. Tu cercanía puede ser la buena obra del día y puede ser la diferencia entre una noche de insomnio y una sonrisa al dormir.
¿Puedes ir un poco más lejos de tu entorno con las buenas acciones? Asómate al sitio web de Cáritas de Monterrey y conoce los casos de las personas que estamos ayudando. Viven condiciones complicadas, enfermedades, abandono, pobreza. Cáritas de Monterrey necesita de buenas obras para seguir proporcionando servicios asistenciales y promoviendo el desarrollo humano de nuestros hermanos.
Hazte voluntario de Cáritas de Monterrey y mira cómo unas horas de tu tiempo dan frutos en las comunidades más vulnerables. Pero si no tienes tiempo, también puedes ayudarnos con donativos en especie o en efectivo. Es muy fácil donar desde nuestro sitio web. Las buenas acciones siempre dejan huellas de luz. Abre tus ojos y el corazón te dirá dónde necesitan de ti.