Todos tenemos la capacidad de transformar nuestra realidad. Lo dijo Freud, con otras palabras que se pueden resumir en: nos adaptamos a la realidad, pero también la transformamos. Además, esto significa que no solo logramos cambios para nosotros, sino que también realizamos acciones que cambian a otros. El impactar positivamente a los demás, es un hecho que a muchos nos emociona… ¡y queremos hacerlo todo el tiempo!
Son principalmente las personas más vulnerables quienes necesitan de nuestra capacidad de transformación. Si supieras que en este mismo momento, haciendo algo mínimo, cambiarías por siempre y para bien la vida de alguien, seguramente lo harías, ¿verdad? Pues eso sucede todo el tiempo, la diferencia es que no te enteras quién está esperando el momento en el que te decidas a ayudar.
Conoce a Manuel
Manuel, es un joven de 24 años que padece epilepsia de difícil control y parálisis cerebral con espasticidad. Después de un embarazo normal, su mamá tuvo algunas complicaciones durante el parto, lo cual derivó en hipoxia perinatal (falta de oxígeno al cerebro) y, posteriormente, en las deficiencias que lo aquejan desde su nacimiento. Sus terapias de rehabilitación comenzaron a los ocho meses de edad, y hasta el momento le han practicado dos cirugías de liberación de tendones.
Manuel se encuentra postrado en cama: no habla, no camina, no extiende los brazos, los mantiene doblados a la altura de sus hombros… Su madre es se encarga día y noche de brindarle los cuidados y atenciones que necesita, cargándolo para moverlo de un lugar a otro, bañarlo, sentarlo, etc.
En el 2015 su situación se agravó dado que presentó dificultad para deglutir, y desde entonces ha tenido que alimentarse por medio de una gastrostomía. Requiere de una dieta especial y, entre otras de sus necesidades, están el material de curación, pañales desechables y su transportación.
Su padre trabaja como empleado en un taller, pero sus ingresos son variables e insuficientes para cubrir las necesidades básicas de la familia. El hermano de Manuel estudia y trabaja, solventando por él mismo los gastos de sus estudios, por lo que no puede apoyar económicamente a la familia. Su madre está a cargo de Manuel del tiempo completo y no tiene la oportunidad de laborar.
Así es la realidad de Manuel, y de mucha gente. Afortunadamente, no se encuentran solos, y ahí es donde tu compasión y generosidad entran en acción. Gracias a donaciones económicas a caritas de monterrey podemos hacer que Manuel o persona como él lleven una mejor calidad de vida.
Ayuda a Manuel
Los donativos recurrentes a Cáritas son los ideales para atender estos casos de ayuda. El principal objetivo es lograr que personas con grandes necesidades, puedan continuar con su vida de la forma más regular posible.
Ten presente tu poder de transformación. Conviértete en un donador recurrente de Cáritas de Monterrey y sé un agente de cambio en personas como Manuel, a quien por cierto, puedes conocer aquí.