La agresión que transformó su vida
Juan Carlos es un joven alegre e inteligente con deseos de seguir superándose en la vida, sin embargo sus anhelos fueron interrumpidos cuando lo agredió un vecino quien le aventó una piedra en la cabeza dejándolo inconsciente. A partir de ese momento, su vida no fue la misma.
Estuvo internado en el hospital donde los médicos le detectaron una fractura de cráneo, por lo que le tuvieron que realizar dos procedimientos quirúrgicos.
Después de las cirugías, Juan Carlos se mantuvo estable, consciente, pudiendo hablar y escuchar, aunque tuvo una temporada donde presentó problemas visuales y dolores de cabeza que resultaban ser un problema. También debía evitar exponerse a alguna caída o golpe en la cabeza porque pondría en riesgo su salud.
Juan Carlos y su familia se acercaron a Cáritas de Monterrey solicitando ayuda para conseguir una malla de titanio, pues sus únicos ingresos económicos eran los que sus hermanos podían llevar a casa, siendo insuficientes para poder cubrir sus necesidades básicas, especialmente el material quirúrgico que Juan necesitaba para poder tener una calidad de vida óptima.
Una segunda oportunidad
Hoy, con el donativo de muchas personas, Juan Carlos tiene una oportunidad más para vivir y salir adelante. Ahora trabaja y lleva el sustento a su hogar, disfruta a su familia con menos preocupaciones y es testigo de que con tu ayuda, Cáritas de Monterrey apoya los sueños de más personas.
Tú puedes ayudarnos a transformar vidas como la de Juan Carlos. Súmate a esta cadena de amor y sé parte de los milagros que día a día vivimos en Cáritas.
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