Caso de ayuda: Con tus donativos pudimos mejorar la calidad de vida de Uziel

Es maravilloso ver crecer a un niño sonriente y sano. Sus primeras palabras y su sonrisa iluminan la vida de sus padres y demás familiares que están a su alrededor. Quien ha vivido esta experiencia sabe lo enriquecedora que es. Aunque no todos los niños nacen con la salud o las condiciones requeridas para un desarrollo estándar, cada uno lleva en sí mismo una lección de vida.

Descubre la historia de Uziel

Existen casos como el de Uziel, que nos invitan a la compasión y a la activa colaboración para mejorar la calidad de vida de una familia vulnerable. 

Uziel es el hijo menor de Briseidy, una joven de 19 años que vive en el municipio de Monterrey, y que además es madre de otros dos pequeños, Elías y Gerardo de seis y tres años. Gerardo nació de ocho meses, por lo que ha tenido un leve retraso psicomotor y daño cerebral que le provoca espasticidad, o contracción involuntaria de ciertos músculos. 

Sin embargo, Uziel es quien vino a transformar la vida de su familia, al nacer con una severa malformación cerebral causada por el virus del Zika. 

Esta malformación que padece Uziel mantiene separados sus dos hemisferios provocando parálisis cerebral, una seria desnutrición crónica y epilepsia. No puede ver, caminar, ni hablar. A causa de la desnutrición luce como un bebé de nueve meses. A pesar de que Briseidy no encontraba la forma de mejorar la calidad de vida de su hijo, la sonrisa del niño se mantenía y cada día mostraba el valor por salir adelante. 

Antes de la ayuda de Cáritas de Monterrey, la familia vivía una constante incertidumbre, ya que su la mujer de 19 años no podía mantenerse en un trabajo fijo, pues Uziel la necesitaba constantemente. Para sobrevivir, la joven madre vende ropa de segunda mano, pues su pareja la abandonó apenas supo las condiciones en que nació su hijo. La abuela paterna del menor los apoya con algo de dinero, mientras que la abuela de Briseidy los recibió en su casa y les asignó un pequeño cuarto con lo indispensable para subsistir. La situación nutricional de la familia era lamentable y ella no tenía la oportunidad de mejorar la calidad de vida de sus hijos. 

¿Cómo pudimos mejorar la calidad de vida familiar de Uziel?

Briseidy se acercó a Cáritas de Monterrey para solicitar ayuda para su hijo. Debido al padecimiento de Uziel, se detectaron sus necesidades entre las que se encontraban pañales desechables, atención médica periódica, terapias, alimentación especial para aliviar su desnutrición, medicamentos, entre otros. Todo ello requería de una inversión estimada de 20 mil pesos. Gracias al apoyo que la comunidad brindó a través de Cáritas, Uziel ha mejorado su calidad de vida. 

Tan solo el hecho de saber protegido a su hijo Uziel, Briseidy ha podido ampliar su panorama y buscar nuevas opciones para sus hijos. Gracias por ayudarnos en esta gran misión. Al colaborar con Cáritas de Monterrey, contribuirás a mejorar la calidad de vida de otras personas que te necesitan, ingresa al Portal de Casos de Cáritas y ayúdanos a transformar vidas. ¡Esperamos tu colaboración!