Nadie desea morir, sin embargo, a veces adquirimos hábitos que nos acercan mucho a ese trance. Un ejemplo de ello es el fumar, que de acuerdo con diversos informes es la principal causa de muerte prevenible. Un 50 % de las personas que consumen tabaco morirán a causa de este hábito o de consecuencias relacionadas a éste. Terminar con este hábito no es sencillo, pero son múltiples las ventajas de dejar de fumar que existen para la salud, tantas que desde los primeros minutos comenzarán los cambios en la vida del fumador.
Dejar de fumar exige mucha perseverancia. El cuerpo y la mente habituados a la nicotina pondrán una serie de obstáculos, como la ansiedad, la irritabilidad, el apetito y su consecuente subida de peso… sin embargo, al mismo tiempo se están generando los primeros efectos positivos en el cuerpo del paciente, como la normalización del pulso, la presión arterial y la temperatura de las manos y los pies, prácticamente desde los primeros 20 minutos sin fumar. Con solo un día sin fumar, las probabilidades de sufrir un infarto comienzan a disminuir y el nivel de oxígeno en la sangre comienza también a regularizarse.
Muchos fumadores intentan en varias ocasiones dejar de fumar antes de lograrlo definitivamente. No se trata de fracasos. Cada paciente debe encontrar el método más efectivo para él. Sin embargo, es la constancia la que hará que cada pausa sea un aprendizaje. La presencia de un médico u orientador es un fuerte apoyo, pero el esfuerzo es del propio paciente.
Ventajas de dejar de fumar
Con tan solo un par de semanas sin fumar, la circulación sanguínea mejora, facilitando actividades físicas como caminar o nadar. La función pulmonar también mejora hasta en un 30 %. Conforme avanzan los meses lejos del tabaco, las probabilidades de infarto o enfermedades graves como cáncer de pulmón, hígado, páncreas o boca, reducen drásticamente. Si hay algún padecimiento adyacente como diabetes o hipertensión, dejar de fumar permitirá una atención más efectiva a esos padecimientos.
La familia, el ejercicio, amigos con hábitos saludables, nuevas actividades y el acompañamiento médico son los grandes aliados de las personas que deciden dejar de fumar. ¡Sí se puede dejar de fumar, inténtalo!