La búsqueda de la felicidad es algo tan natural en el ser humano que se podría afirmar que está al centro del sentido de la vida. Queremos ser felices la mayor cantidad de tiempo posible. Sin embargo, no tenemos mucha consciencia de qué es lo que nos hace felices. Si lo supiéramos, la felicidad sería un estado accesible, tanto, que su búsqueda ya no sería necesaria.
Lo que sí sabemos, es que hay acciones que nos permiten acercamos a la felicidad.
especialistas han realizado diversos estudios y coinciden en que la felicidad la encontramos más al dar que al recibir. Por ejemplo, cuando somos generosos, el componente químico del estrés en nuestra sangre se desvanece más rápido, según una investigación de la Universidad Simon Frasser en Canadá.
Por su parte, expertos de la Universidad de Harvard encontraron que los bienes materiales solo aumentan nuestra satisfacción a corto plazo, sin colaborar a nuestra felicidad a futuro.
También una encuesta que comprendió a 4,500 personas en Estados Unidos que han participado activamente en el voluntariado, reveló que un gran porcentaje de estas asegura haber mejorado su salud física, mental y en general, su felicidad.
Esto último es una gran noticia si tú eres de las personas que quieren hacer una diferencia en otras a través del generoso acto de prestar tu tiempo y talento al servicio de los demás.
Razones de por qué el voluntariado hace feliz a la gente
- Cuando lo haces, se disminuyen el estrés y la ansiedad relacionados con aquello que te preocupa de tu día a día. Al anteponer a eso las necesidades de alguien más, te liberas de preocupaciones y te concentras en el aquí y ahora.
- Pones en práctica o desarrollas habilidades relacionadas con tratar con otros. Entre estas se encuentran la tolerancia, la paciencia, el trabajo en equipo, la solución de problemas, entre otros.
- Tu confianza y autoestima aumentan cuando otra persona resulta beneficiada o alcanza un objetivo deseado gracias a tu ayuda.
Es innegable: las actividades de voluntariado traen aprendizaje y crecimiento personal a quien las realiza. Si éstas son un camino para la felicidad, ¿por qué no hacerlas de forma constante?
Únete a las más de 16,000 personas que hacen voluntariado a través de Cáritas de Monterrey. Un poco de tu tiempo, se suma al tiempo brindado por muchos otros y así, esas valiosísimas horas se convierten en bienestar, alimento, vestido, educación y, para ti, en momentos de felicidad.