La Posada de Peregrino de Monterrey necesita de tus aportaciones voluntarias para seguir asistiendo a las personas que diariamente llegan a la ciudad en busca de un milagro de salud
La calidad de vida en México es muy variable. Hay ciudades en las que se cuentan con todos los servicios básicos, principalmente los de salud, en los cuales se atienden a los pacientes con equipos de gran tecnología, sin embargo, en otras ciudades no, y para lograr tener una buena salud se ven en la necesidad de trasladarse a otros estados.
Diariamente llegan a nuestra ciudad personas de diversas ciudades del país con el fin de atender sus problemas de salud en los diferentes hospitales del área metropolitana. Muchos de ellos llegan con recursos otorgados de parte de su clínica de procedencia, mientras que la otra gran parte por medios propios.
En ocasiones estas personas no cuentan con los ingresos suficientes para costear sus necesidades básicas, ya que dependen de los ingresos que sus familiares aporten acorde a sus posibilidades, por tal razón, la Posada del Peregrino de Cáritas de Monterrey brinda alojamiento, alimentación y diversos servicios a nuestros hermanos desamparados.
Es el caso de la Sra. Elvira López, quien se acercó a la Posada del Peregrino en junio de 2017 cuando su hijo Juan Daniel Medellín López de 43 años, estuvo hospitalizado durante dos meses tras haber sufrido un accidente automovilístico.
Ambos son procedentes de la ciudad de Río Bravo, Tamaulipas, y regresan a visitar a sus familiares por periodos de 15 días mientras se llega el día de su nueva cita. Daniel ha tenido varias intervenciones quirúrgicas, esto con el fin de mejorar su calidad de vida y seguir adelante.
La Posada del Peregrino de Cáritas Monterrey necesita de tus aportaciones voluntarias para seguir asistiendo a las personas que diariamente llegan a la ciudad en busca de un milagro de salud.
Súmate y apoya con tus donativos para que la Posada del Peregrino siga asistiendo a personas foráneas que necesitan de alimentos y cobijo durante estos momentos de pesadumbre. ¡Ayudar a otros, está en tus manos!